La melatonina ha sido llamada durante mucho tiempo la hormona del sueño, su acción se asoció exclusivamente con el manejo de los ritmos circadianos humanos. Estudios recientes han demostrado que este compuesto químico activo tiene una funcionalidad más amplia.
La «hormona del sueño» comienza a producirse en el intervalo de 20 a 22 horas. Las concentraciones de melatonina alcanzan su punto máximo desde la medianoche hasta las dos de la mañana, y a las seis a las siete de la mañana cae a un nivel mínimo.
La melatonina
- Absorbe los radicales libres: moléculas inestables que dañan órganos y tejidos, conducen a una disminución de la inmunidad, el desarrollo de neoplasias y enfermedades cardiovasculares.
- Es el inmunomodulador natural más fuerte, restaura las células dañadas, previene enfermedades, incluido el cáncer.
- Tiene un pronunciado efecto cronobiótico: regula los biorritmos diarios y estacionales.
- Promueve conciliar el sueño, es responsable de un sueño reparador tranquilo, trayendo descanso natural.
- Regula el sistema endocrino, normaliza la temperatura corporal.
- Actúa como antidepresivo y previene la aparición de ciertos trastornos mentales.
- Ralentiza la tasa de envejecimiento, aumenta la esperanza de vida.